Autora: Agustina Sánchez Beck
El martes el gobierno nacional estableció un aumento del precio estacional de la energía para los usuarios de ingresos medios (N3) y bajos (N2) del 439% al 1819% a partir de junio.
Se establece que los usuarios de ingresos bajos y medios pagarán a partir de junio $57.214 por MWh de los $2.981 y $3.756 por MWh que pagaban hasta hoy. Sobre eso se establecen topes de consumo y bonificaciones.
Un usuario de ingresos bajos pasará a pagar un 439% más por el precio de la energía, si se excede de ese consumo, un usuario de ingresos bajos pasará a pagar un 1819% más por el precio de la energía.
Por su parte, un usuario de ingresos medios pasará a pagar un 572% más por el precio de la energía dentro de un consumo de 250 kv. Si se excede de ese consumo pasa a pagar un 1423% más por el precio de la energía.
Los ingresos altos, los comercios, la industria, las escuelas y hospitales pasarán a pagar un 28,9% por el precio de la energía. Este aumento se suma al aumento del 117% al 401% que sufrieron estos usuarios en febrero sobre el mismo componente.
¿Por qué esto es así?
En otra resolución se definen topes de consumo y bonificaciones para los ingresos medios y bajos. Esto se enmarcan en el decreto de la semana pasada que eliminó el límite de aumento del precio estacional por variación salarial para estos usuarios
Los usuarios de ingresos bajos tendrán un tope de consumo de 350kv, en ese tope tenés una bonificación del 71%. Dentro de los primeros 350 kv pagas $16.065 por MWh, si te excedes del tope pagas $57.214 por MWh. Las regiones que no tienen gas, el tope de consumo es de 700kv.
Los usuarios de ingresos medios el tope de consumo se reduce de 400 kv a 250 kv, en ese tope tenés una bonificación del 55% es decir que pagas $25.231 por MWh. Si te excedes del tope pagas $57.214 por MWh. En las regiones que no tienen gas el tope de consumo es de 500 kv.
Según el propio gobierno1 el aumento en la factura final para un consumo promedio de 260kv será del 180% para los ingresos medios, del 100% para los ingresos bajos y del 24% para los ingresos altos. Lo siguiente es una captura de un comunicado oficial del gobierno:
Una familia de ingresos medios, con electrodomésticos básicos como heladera, lavarropas, televisión y aire consume entre 1000 kv y 1500kv, la reducción del tope de consumo a 250 kv para acceder a una bonificación del 55,9% es un golpe muy duro sobre la clase media.
Conclusiones:
No solo es criminal el aumento sobre el precio estacional para los usuarios de ingresos medios y bajos, sino que a su vez es brutal la reducción del tope de consumo por las implicancias que va a tener sobre la clase media principalmente.
Si tenemos en cuenta que una familia de ingresos medios, con electrodomésticos básicos como heladera, lavarropas, televisión y aire acondicionado consume entre 1000 kv y 1500kv, la reducción del tope de consumo a 250 kv para acceder a una bonificación del 55,9% es un golpe muy duro sobre la clase media.
Lo que está buscando el gobierno con estas medidas no es sólo recaudar más, para bajar los subsidios, en pos de conseguir superávit presupuestario; sino reducir al mínimo el consumo eléctrico nacional. Cuanta menos electricidad y combustible se consuman, más podrán exportar las grandes empresas de energía y, simultáneamente, se reducirán las importaciones.
Pero además, a pesar del aumento del precio estacional del 400% al 1800% para los ingresos medios y bajos, esto no termina de reflejar el costo monómico, es decir que sigue habiendo subsidios. Según el propio gobierno, el precio estacional sin subsidio debería ser de $71.411 por MWh, es decir, que todos los usuarios continúan recibiendo hoy un porcentaje de subsidio.
Esto es así porque el costo monómico dolarizado no dejará de aumentar en la medida que no se renegocian los contratos con rentabilidad en dólares del 85% al 95% firmados entre 2016 y 2019 que corresponden al 70% de la electricidad contratada por CAMMESA.
A esto se le suma que por la crisis de gas de la semana pasada las centrales térmicas empezaron a generar electricidad a partir de fuel oil y de gasoil con cargamentos que compró CAMMESA en emergencia a 20 dólares el MMBTU. Además CAMMESA importó electricidad a Uruguay, Bolivia y Chile a 210 dólares por MWh; lo que presionará aún más sobre el valor del monómico. Lo que estamos queriendo decir es que incluso con estos aumentos brutales y con el dogma de eliminar subsidios, el gobierno no logra una quita del 100% de los subsidios producto del problema contractual y estructural que tenemos en la generación de electricidad.
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